En 1904 se constituye en Barcelona "La Hispano-Suiza, Fábrica de Automóviles, S.A." Desde ese momento comienza la rápida ascensión de un nombre que llegaría con el tiempo a simbolizar la quinta esencia del refinamiento, de la potencia, e la elegancia y la riqueza de la forma.

A partir de 1911, paralelamente a su actividad en España, la empresa se instala en Francia, bajo la forma de un establecimiento industrial que, en 1923, dará lugar a la Société Française Hispano-Suiza. Este prestigioso nombre forma hoy parte de una filial de SNECMA. La Société Hispano-Suiza goza en la actualidad de un alto reconocimiento dentro del mundo de la aeronáutica.